Niños

Durante el periodo de crecimiento, el niño aprende a mantener la cabeza erguida, a gatear y a caminar (actividades que afectan el alineamiento de la columna). Luego empieza a practicar actividades físicas propias de su edad (monopatín o bicicleta). Durante la etapa escolar, lleva una mochila cargada y pasa horas sentado estudiando o delante del ordenador. Todas estas actividades pueden producir pequeñas pero ya significativas subluxaciones que si no son corregidas conducirán a problemas más severos en la edad adulta.
No espere a que sus hijos sufran un traumatismo o desarrollen un síntoma evidente, la prevención es la clave de una buena salud.